El término generosidad tiene un significado especial para el maestro de Dios. No es el significado usual de la palabra; de hecho, es un significado que debe ser aprendido y aprendido muy cuidadosamente.
Al igual que todos los demás atributos de los maestros de Dios, éste se basa a fin de cuentas en la confianza, puesto que sin confianza nadie puede ser generoso en el estricto sentido. Para el mundo, generosidad significa "donar" en el sentido de "ceder" "renunciar" "rendirse". Para los maestros de Dios, generosidad significa "donar" para conservar. A lo largo del texto y del libro de ejercicios esto se ha enfatizado, sin embargo es quizá la idea más ajena al pensamiento del mundo que muchas de las otras ideas en nuestro programa de estudios. Lo que la hace más extraña es el hecho de que es obviamente lo opuesto a la manera de pensar del mundo. En el modo más claro posible y en el nivel más simple, la palabra significa exactamente lo opuesto para los maestros de Dios que para el mundo.
El maestro de Dios es generoso por interés en Sí mismo. Pero no nos referimos aquí al interés propio del ser del que el mundo habla. El maestro de Dios no quiere nada que él no pueda dar, pues se da cuenta de que, por definición, ello no tendría ningún valor para él. 4¿Para qué lo iba a querer? Sólo podría perder por su causa. No podría ganar. Por lo tanto, no busca nada que sea sólo él pueda conservar, ya que eso sería una garantía pérdida. El no quiere sufrir. ¿Por qué iba a querer asegurarse el dolor a sí mismo? En contraparte, sí quiere conservar para sí mismo todas las cosas que son de Dios, y que, por ende, son para Su Hijo. Ésas son las cosas que le pertenecen. Esas sí que las puede dar con generosidad verdadera, protegiéndolas eternamente para sí mismo.
Un Curso de Milagros
[Características de los Maestros de Dios]
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