miércoles, febrero 01, 2006

Resistencia al Amor

I

Ya hemos conversado bastante acerca del amor, te he dicho que el amor es libertad y que es la identidad de tu verdadero Ser. La razón por la cual te identificas aún como un ego es que te consideras separado del amor.

Te has preguntado varias veces por qué sientes tanta resistencia al amor, pero te diré una cosa: eso es imposible. Negar quien eres no tiene ningún significado, no puedes renunciar a lo que Dios te dio y sobre todo no puedes destruir a lo que Dios ya le ha dado vida. De nuevo, la única razón por la cual piensas que te resistes es porque piensas que estás separado de lo que tú eres.

Sé que por tu mente pasaron varios pensamientos antes de escribir la verdadera causa de tu aparente resistencia, eso es normal, quieres justificar lo que percibes y eso no puede sino hacerlo verdadero para ti. Negar la negación de Dios simplemente significa darle realidad a las cosas que son irreales y ver como ilusiones las que no lo son. Para esto no puede haber excepción, cuando lo haces, eso es resistirse al amor.

Te haré esta pregunta de nuevo: ¿Estás dispuesto a abandonar lo que no es nada por lo que es todo? Y nuevamente: la simplicidad de esta pregunta encierra la clave para tu liberación de este mundo. Lo que tu valoras de este espacio-tiempo no es nada, no es que sea menos que lo que Dios te ofrece: NO ES NADA.

Amado, te pido que te mantengas conmigo, grandes tiempos se avecinan y te necesito preparado para el salto que todos vamos a dar. No te confundas, tú ya estás iluminado y estás aquí conmigo en el Cielo, pero lo único que se requiere de ti es que lo aceptes para ti mismo; ese es el gran momento del que te he hablado.

II

Conversemos un poco acerca de tu pensamiento. Cuando tú piensas realmente no lo estás haciendo. En este mundo tu crees que piensas y por eso crees que ves. De esta última frase se desprende que tu pensamiento es la causa de las cosas que tú crees experimentar.

Para que este mundo exista es necesario tu pensamiento, quítaselo por un instante y lo verás desaparecer. Eso ya lo sabes, has experimentado que al dejar de pensar las cosas que ves desaparecen y en su lugar queda la luz, y esto es la confirmación de que lo que tú ves no es nada.

Sin pensamientos tampoco puede haber una identidad separada, o ego, por eso tanto te insisto en que dejes de pensar. En un principio podría sonar amenazador que alguien te exhorte constantemente a que no pienses, pero ahora que ya puedes discernir entre lo que quieres y lo que no, puedes comprender por qué esta petición es tan importante.

La lección que leíste esta mañana te hacía llegar la idea de que todo lo que ves es perecedero y es una forma de venganza, también te pedí que te preguntaras si esto es lo que querías ver y te dije que tu respuesta seguramente sería que no. ¿No es un alivio total saber que ninguna de las cosas que ocupan tu mente existen? ¡Y que nunca lo hicieron! ¿No es la noticia más alentadora de todas saber que tú no eres una víctima de las cosas que ves ni tienes que vengarte de eso que realmente nunca ocurrió? ¡El mundo real es aquí y es ahora! Si es esto lo que quieres ver, entonces ¿Cómo se hace para verlo? La lección que le sigue tiene la respuesta: Puedes escapar del mundo que ves renunciado a tus pensamiento de ataque.

Para el ego suele ser diferente renunciar a los pensamientos de ataque a dejar de pensar, pero la verdad es que cualquir cosa que pienses, cualquiera, desde tu conciencia de separación es pensamiento de ataque. Cuando entiendes que Tú no estás separado de nada, la idea de que todo pensamiento que proceda de tu consciencia de separación es un ataque contra tí mismo y es una forma de venganza se te hace natural.

Renuncia a tus pensamientos de ataque y le estarás abriendo las puertas a un amor que es tan maravilloso que no puede ser conocido en este mundo. Por eso te insisto una vez más, y no dejaré de hacerlo hasta que tú te veas aquí conmigo, unidos a todo, tal como yo lo veo: No te resistas al amor, no creas en lo imposible, ábrele las puertas al ahora.

Yo te he llamado, y tú has respondido, ya nada puede salir mal porque estoy aquí para guiarte.

III

Hoy quiero comentarte un par de cosas acerca del dar para terminar nuestra conversación acerca de la resistencia al amor. Amor es dar, pero lo único que verdaderamente puedes dar es libertad. Eso puede sonar un poco confuso al principio porque pareciera que no se puede dar algo que no es tangible o en el caso más probable imaginas que la única manera de dar la libertad es que tengas algo encarcelado en algún lugar. Pues precisamente es así, tienes al mundo bajo llave y no eres libre por eso.

La principal causa por la cual has tomado como prisionero al mundo es porque consideras que hay cosas en él que son muy valiosas para ti y que sin ellas morirías. Piensas quizás que la comida es importante para ti, que tu pareja es importante, y que sin un par de vacaciones al año no podrías vivir. Otra forma de aferrarse a este mundo está en lo que tú consideras "malo": los desastres naturales, la muerte de algún ser querido, que se averíe tu carro. Esto es lo que llamamos el apego.

El apego es simplemente una medida de privación de libertad que has emitido en relación a otra cosa (que no es otra cosa sino tú mismo) Decides que sería conveniente reservar ese pedazo de mundo y mantenerlo aparte, para que otros aspectos de tu mundo no se vean o sean interfiridos por él; y piensas que la mejor manera de sobrellevar este mundo es saber administrar cada trozo de manera que todos puedan coexistir.

Nada puede estar más alejado de la verdad ¿Qué otra cosa sino esa idea loca puede ser la resistencia al amor? Tener apegos en este mundo significa considerarlo como algo real, y así será para ti. No seas un ave con las alas clavadas en el suelo por tratar de clavar en este mundo las cosas a las que estás apegado, libéralas y así te estarás liberando a ti mismo. Recuerda que lo mejor que puedes hacer para ello es dejar de pensar y no identificarte con lo que es una ilusión.

El amor es lo único que te sacará de este mundo, dar, dar, dar, esa es tu misión. Sé que en este momento te preguntas acerca de las formas de manifestar el amor. Esta pregunta es muy engañosa porque te hace creer que el amor es algo allá afuera que de alguna manera debes traerlo a este mundo. ¿Recuerdas que estoy aquí contigo? todo lo que tienes que hacer se te indicará, basta que te quedes muy quieto en tu mente y oigas una voz que te habla de lo perfecto que Tú eres. Esa voz, también puede ayudarte en lo que tú aún crees que estás apegado.

Es común que la gente pida cosas del mundo cuando pide por ayuda, con el ejemplo del teléfono: sabes que un teléfono sirve para comunicar a dos personas que no se encuentran próximas; pero lo que no sabes es para qué quieres comunicarte con la otra persona. Lo que eventualmente has llamado el ego "epiritualizado", una fracción de tu ego que está empezado a ver la verdad, pero que intenta sacar provecho para sí mismo, suele pedir manifestaciones en forma de algún acontecimiento, como encontrar un puesto de estacionamiento, y lo que en la mayoría de los caso ocurre es que no lo encuentra y se molesta con Dios por no haber satisfecho su petición.

Un pedido desde el ego no es un pedido realmente, es un ruego de amor, y siempre, siempre, siempre, es contestado, aunque no sea en la forma que él está esperando. Debes estar vigilante en tu mente de los pensamientos que cruzan por ella, para que eventualmente dejes de pensar como un ser separado y empieces a discenir entre las peticiones que tienen sentido y las que no.

Te he dicho que cuando un hermano se acerca a ti con algúna petición absurda lo complazcas, y con esto me refiero a que tu hermano te está haciendo una petición de amor ¡Libéralo de la cárcel en la que lo tienes encerrado! Bríndale la visión que yo tengo de él y de tí, únete en un instante santo a cada persona que llegue ante ti. Cuando un hermano y tú se encuentran eso es sagrado, no te olvides de ello.

Te amo inmensamente hermano mío, mi verdadero Ser.


3 comentarios:

darYrecibir dijo...

Gracias por esta exposición, me abres un nuevo panorama, es tan claro la forma en que lo explicas.
Gracias, esto es un regalo, tengo que celebrar:
Gracias Padre!!!

Anónimo dijo...

Gracias José Lorenzo,Bendito Eres.

Diana Chapa dijo...

Excelente nota!! gracias