Tuvimos un "taller" (que me suena a taller mecánico) y la mera idea de que algo deba ser reparado, perfeccionado o mejorado es la ilusión que justamente el Espíritu Santo en su amorosa luz desvaneció.
¡Celebremos!
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Cómo???. El afán de superación, de reparación, rectificación de errrores, según el Curso de Milagros, no es necesario..basta con la intención??? Es eso lo que queréis decir?? Hay que reconocer que demasiado esfuerzo, autoexigencia por avanzar, igual se nos vuelve a la contra. Queréis decir, aflojarnos, relajarnos y actuar tranquilamente sin tanto estrés de esfuerzo. Es eso???
Quiero decir ¡Celebremos! El perdón es una ilusión necesaria aquí donde la ilusión de agravio impera, en el Cielo no se precisa.
El Reino de los Cielos está dentro de mi, en mi mente, la conciencia del Cielo es el regalo que me da el Espíritu Santo, y en el Cielo todo es perfecto tal como es.
¡Celebremos!
Si deseas seguir comentando me encantará leerte en mi buzón personal: quebellos.somos@gmail.com
Además desde la luz del Espíritu Santo sólo puedo distinguir perfección, es imposible ver cualquier cosa imperfecta o perfectible, eso sólo sería evidencia de que NO estoy viendo a través de los ojos del amor, sino los del ego.
3 comentarios:
Cómo???. El afán de superación, de reparación, rectificación de errrores, según el Curso de Milagros, no es necesario..basta con la intención???
Es eso lo que queréis decir??
Hay que reconocer que demasiado esfuerzo, autoexigencia por avanzar, igual se nos vuelve a la contra. Queréis decir, aflojarnos, relajarnos y actuar tranquilamente sin tanto estrés de esfuerzo.
Es eso???
Quiero decir ¡Celebremos! El perdón es una ilusión necesaria aquí donde la ilusión de agravio impera, en el Cielo no se precisa.
El Reino de los Cielos está dentro de mi, en mi mente, la conciencia del Cielo es el regalo que me da el Espíritu Santo, y en el Cielo todo es perfecto tal como es.
¡Celebremos!
Si deseas seguir comentando me encantará leerte en mi buzón personal: quebellos.somos@gmail.com
Además desde la luz del Espíritu Santo sólo puedo distinguir perfección, es imposible ver cualquier cosa imperfecta o perfectible, eso sólo sería evidencia de que NO estoy viendo a través de los ojos del amor, sino los del ego.
Publicar un comentario