El ego no puede elegir entre lo real y lo ilusorio. Cualquier elección que hace es siempre entre ilusiones. El ego es parte de la ilusión, es el príncipe del mundo de la ilusión.
La buena noticia es que es un príncipe sin poder,
el ego no puede actuar sin mi consentimiento.
Así no puedo ser víctima del ego.
De nada.
La buena noticia es que es un príncipe sin poder,
el ego no puede actuar sin mi consentimiento.
Así no puedo ser víctima del ego.
De nada.
Soy responsable de todo.
También de hacerme creer que yo no tuve nada que ver.
"Cuando te sientas triste, reconoce que eso no tiene por qué ser así. Las depresiones proceden de una sensación de que careces de algo que deseas y no tienes. Recuerda que no careces nada, excepto si así lo decides, y decide entonces de otra manera."
Libro de Texto Cap. 4.IV.3
Un Curso de Milagros
A Course in Miracles
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