Así empezó, es tiempo...

Así empezó: primero me vi con un color (atributo, personalidad, nacionalidad, género, código postal, afición, preferencia) diferente, sobresaliente, distinto, particular, ajeno, original, extraordinario. Es más, de hecho llegué a creer que por mi mismo yo: la hojita amarilla era el "todo" ...en fin...

Luego, llega UCDM y me dice "no eres la idea que tienes de ti mismo" esa "identidad" que te has forjado -ideado o adjudicado- no es la tuya, sino que dicha idea es un simple pensamiento de lo que crees o imaginas ser. Lo terrible del tema es que ese pensamiento que al que llamas "mi mismo" es precisamente lo que te ha limitado, constreñido, restringido de saberte unido al Todo y del gozo que conlleva ese reconocimiento.

Mi ego luego luego se resiste -óyeme tú, yo no soy un pensamiento ¿qué no me ves? ¿acaso estás ciego? tengo forma, color, dimensión, tiempo.

Te veo mejor de lo que tu crees, de hecho no preciso de los ojos para ver, justamente a ojos cerrados te veo y eres Todo. Lo que no eres son las ideas de lo que crees que eres, precisamente esas ideas son las que te impiden percibir tu Ser Real, el inmutable, eterno y todabarcador. Tu Verdadero Ser que se encuentra eternamente en perfecta paz, ajeno e invulnerable ante supuestas amenazas de las estaciones, el clima, los recursos, el tiempo.

Inicia la conversación -¿quieres decir que no me va a importar, preocupar o angustiar la época del año, o que sople el viento y me desprenda de la rama, o que con esto del estiaje ya cada vez tenga menos agua y se acabe mi tiempo vital?

Así es, te va a tener sin cuidado todo ello puesto que -de hecho- cuanto mencionas no son más que ideas que soportan la creencia de la pérdida, la escasez y la muerte; sin duda nociones amenazantes para quien cree ser limitado, efímero y vulnerable. Por ello es que tu falsa identidad nunca estará en paz, mientras que tu Ser Real siempre está a salvo sólo que no lo recuerdas.

-Wow, si es así como dices, entonces quiero recordar mi Verdadera Identidad . ¿Qué tengo que hacer, qué necesito?

No tienes que hacer nada, justamente esta pequeña dósis de buena voluntad es lo que se precisa y el Espíritu Santo se hará cargo para enseñarte a aprender a desaprender y con ello desprenderte de los pensamientos inútiles a los que antes valorabas.

-Bien. Listo. Quiero recordar, ven Espíritu Santo, despréndeme los pensamientos con los que me identifcaba falsamente. ¡Ven Espíritu Santo!


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-¡Qué terrible! ¿Para qué te hice caso? ¿Ves lo que ocasionas? ¿Qué va a ser de mí, ya no podré crecer, qué me espera? Y con toda tu palabrería me enredaste "bla, na, na, na, na, bla, na, no hagas nada" ay si tu y yo creyéndote ¿Qué va a ser de mí? ¡Quedé atrapada!...

Revisa estas ideas conmigo: ¿estas atrapada por la reja, o por la idea que tienes de ti mismo de que eres una vulnerable y perecedera hojita? ¿cuál es la verdadera reja entonces?





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Un milagro.

-wow no sabía que tenía esta colección de ideas. Con la sacudida ahora las veo: ahi está la idea de la estrechez, la del pasado, la del futuro, la del poder, la de de sobrevivir, y también están mis clasificaciones por atributo, funcionalidad, conveniencia, beneficio. Jajaja, beneficio, me da risa ahora ver que pensaba benéfico un medicamento cuando lo que ocultaba es mi pensamiento errado acerca de la enfermedad. Pero qué barbaridad, qué cantidad de pensamientos tenía entre las ramas neuronales, pensamientos mustios, pálidos, amarillentos y amarillistas, marchitos, lánguidos, son horribles...

Ah ese ego que todavía mete su cuchara, tus pensamientos no son horribles ni hermosos, sólo es energía. Déjame cumplir con mi misión y observa nuevamente...

"La misión del Espíritu Santo es abrirle los ojos a los ciegos, puesto que El sabe que ellos no han perdido su visión, sino que meramente duermen. El les despertará del sueño de olvido al recuerdo de Dios. Los ojos de Cristo están abiertos y El mirará con amor cualquier cosa que tu veas si tu aceptas Su visión como la tuya."
Libro de Texto 12.VI.4.2-4
Un Curso de Milagros
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-Gracias, había creído que el tiempo era adverso que el otoño hace daño, nunca pensé que pudiera ser bello. Ahora entiendo eso de "los años dorados"... ...genial sacudida. Ya no soy la hoja, soy rama, soy árbol y si me quedo sin hojas no hay nada qué temer, inefable reconocimiento soy Todo, Soy El Que Soy.

El tiempo es un recurso más del maestro de Dios, así como los árboles se quedan sin hojas en invierno y mientras pareciera que nada pasa, todo está ocurriendo desde la Fuente. Para el árbol el invierno es un período de crecimiento interior, sacude tus ramas, deshójate ahora, disfruta el invierno, prepárate para el Adviento, conviértete en el maestro perfecto, es tiempo.




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Conviértete en el Maestro Perfecto - Es tiempo
No hay nada que temer

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