De la lista - Las reglas del juego

Llevo en un cuaderno mental una lista de temas que iré publicando en el blog para que compartiéndoles pueda conservarles. (Además dice UCDM que "las ideas se expanden cuando se comparten").

Las reglas del juego.




La interacción a nivel cancha precisa del conocimiento de las reglas (paradigmas, creencias, normas y regulaciones) del actuar a fin de poder participar en el juego, rol, papel o función que la misma cancha nos ha impuesto.

Cada juego contiene lineamientos que los participantes deberán seguir en aras de alcanzar el objetivo: ganar.

Si el objetivo es ganar, esto intrínsecamente implica que es posible perder y que en aras de "no perder" hemos de conocer y seguir las reglas del juego.

Esta relevancia en las reglas del juego se hace evidente cuando como telespectadores escuchamos los comentarios de los expertos mientras presenciamos la transmisión de algunas justas en los "Juegos Olímpicos", queda claro que cada prueba incluye sus no sólo las reglas para ganar, sino también las reglas para calificar como finalista, y los prerequisitos abarcan también el tipo de equipo y vestimenta propio para cada competencia.

¿Qué hay si te dijera que todas las interacciones a nivel cancha -no sólo los juegos olímpicos- obedecen a reglas del juego?

Sí, según tu afición, preferencia, escolaridad, religión, ocupación, juegas a que eres ingeniero, te vistes como ingeniero, trabajas como ingeniero. Juegas a que eres peatón o automovilista y sigues los lineamientos del reglamento de tránsito. Juegas a que eres diabético, juegas a que eres AA, juegas a que eres...

¿Quién puso el juego? Yo (tu).

¿Cuándo? Es parte de la idea de separación de la que se te olvidó reirte.

¿Quién puso las reglas del juego? Yo (tu).

¿Para qué impusiste reglas al juego? Para continuar con la ilusoria separación a partir de calificarme, para así determinar si soy el número uno de los "ganadores" o el número uno de los "perdedores" o si soy simplemente un jugador más de entre los ingenieros, estudiantes, transeuntes, no-fumadores, en fin. Pusiste las reglas del juego en la idea de que hay "grados", hay "niveles" y así los que no sigan tus reglas no califican como "Avanzados" o "Profesionales" o meramente "Buenos", serían entonces "Intemedios" o "Amateurs" o meramente "del montón".

¿Distingues lo peligroso de las reglas del juego? Todas te llevan a estar calificando el desempeño en la cancha, y qué es la calificación sino la emisión de juicios. Y los juicios separan. En la separación no puedo identificarme con el Todo del que formo parte, ese Todo que es la Vida Eterna y creer que es posible separarme de la vida eterna conlleva implícitamente a creer en la finitud, en la mortandad, en la muerte.

Tal como son las reglas del juego, igual son las leyes del mundo que están intrínsecamente ligadas a la finitud, la escasez, la pérdida. Oportunamente me llega el recordatorio de la lección 277 "No dejes que aprisione a Tu Hijo con leyes que yo mismo inventé" feliz vinculación con la lección 132 "Libero al mundo de lo que pensé que era"

Y muchas buenas noticias, tales como que un milagro obedece a las leyes del Amor (que es eterno, inmutable y todoabarcador). Esto implica que el milagro -por poner un ejemplo- no obedece a las leyes del tiempo porque el amor es eterno y no conoce la finitud.

Wow, me emociono, muchos temas que tratar como por ejemplo "Las Leyes de Dios", "las leyes del caos". Vamos por partes, hoy sólo quiero hacer énfasis en que si califico a mi hermano no tengo tiempo para amarlo. Ponerle reglas a los roles y papeles que desempeño a nivel cancha es estar midiendo el actuar propio y ajeno en función de parámetros que solamente están en mi mente y desde esa medición sólo puedo percibir diferencias, grados, niveles, perdiéndome con ello la inefable experiencia de ser parte del Todo, olvidándome que no hay nada fuera de mi.

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I. Confianza