miércoles, octubre 18, 2006

En la rendición mi victoria

Cuando me rindo a cualquier tipo de percepción y pasado,
incluidas las ideas de lo que creía saber,
cuando renuncio a todo,
renuncio también a la acción de juzgar.

Comienzo a ver con el corazón.

La luz que viene del corazón,
no necesita explicaciones ni razonamientos.

Así en la rendición está mi victoria.

Fabiola de la Paz


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4 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdonamos, no porque seamos "buenos" o "caritativos", sino porque lo que vemos no está ahí.

Aprender a perdonar depende enteramente de cambiar nuestra manera de pensar y de corregir nuestros errores, tarea del ES en nuestra mente, siempre que la aceptemos.

Así la victoria sobre las ilusiones del Hijo de Dios está garantizada por la absoluta "racionalidad" del plan de Dios y de la Creación entera. La razón, tan emparentada al conocimiento como lo están, por caso, el presente con la eternidad, la confianza y la fe con la certeza, etc., jamás está reñida con el amor, la inocencia, la paz, la perfección o cualquier otro aspecto celestial. Aquí separamos todo, lo vemos diferente, le ponemos nombres, le adjudicamos niveles de importancia, categorías. En el Cielo eso no existe: Amor, Conocimiento y Creatividad son una trinidad indivisible. Es verdad que la luz que viene del corazón "contestará todas las preguntas" porque tiene la fuerza de la razón, de orden superior, real, innegable, que las contesta a todas por igual y sin palabras.

El amor y el amar, no son dementes justamente porque lo alumbra la luz del perfecto conocimiento. "Yo he vencido al mundo" significa "me negué a rendirme al ego, al miedo, a la culpa, a la demencia irracional, al sufrimiento, a la muerte, al infierno, y busqué la victoria, sin enfrentamientos, del amor, el conocimiento y la creatividad, mediante el aprendizaje racional del perdón, porque sólo la grandeza es lo que un hijo de Dios merece y nunca la miserias de la derrota en las tinieblas"

Con sincero amor, Mario Giomi, "Liriosparatodos"

darYrecibir dijo...

wow gracias qué belleza, cuánta luz. suspiro. Gracias.

Anónimo dijo...

Nuestro don maravilloso (de especie) es una broma macabra. Un escritor dijo que el único eterno es el tigre, porque no tiene conciencia de su muerte(decía tigre por decir cualquier animal).
Todo lo demás, toda la cultura, se reduce a un gesto que bien conocen las madres cuando llevan al médico o al dentista a sus hijos: "no duele hijito..." ese gesto consolador, ese velo dulce entre nosotros y el horror.

Ramma

Mario Giomi dijo...

Yendo contra ti misma, renunciando a todo lo q fabricaste, a todo lo creíste ser, es como te rindes...ante el Cielo (que Tú misma eres!), el E.S. y el Padre Mismo. Es la única rendición sin sangre, porque antes tienes q deponer tus armas. De lo contrario no habrá ningún encuentro con la verdad. Sublime y victoriosa "derrota"! El Precio es la Creación, el Conocimiento y el Amor. Eternamente! Infinitamente! Quiero ser "vencido"!